jueves, abril 23, 2009

Despedidas, Desengaños 6

El día que tú naciste
cayó una gran nevada,
por eso tienes la cara
de merluza congelada.

Por ti no como,
por ti no duermo.
¡Cabrona, dame las llaves del piso!

El día que tú naciste
se confundieron un poco:
no te trajo la cigüeña,
te trajo el pájaro loco.

En Madrid está lloviendo,
en Galicia está nevando
y en la cabeza del nene
un piojo patinando.

Las moscas nacen verdes
y cambian de color;
tú naciste gilipollas
y no te cambia ni Dios.

Luna llena,
cuarto menguante,
[Fulanito,]
no hay quien te aguante.

No desayuno por pensar en ti,
no como por pensar en ti,
no ceno por pensar en ti
y no duermo porque tengo hambre.

No vayas por la calle
con tanta hermosura,
que puede que te pille
el camión de la basura.

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